Las autoridades gubernamentales informaron esta tarde, que un numeroso grupo de talibanes emboscó un convoy policial que transportaba a un importante político local en el este del país.
La emboscada dejó un saldo de veinte policías muertos junto con setenta insurgentes, aunque las cifras extraoficilaes dicen que son muchas mas de víctimas en ambos bandos. El sangriento choque se prolongó durante cinco horas.
El enfrentamiento entre los policías afganos y el grupo talibán ocurrió en el distrito de Sherzad, en la provincia de Nangarhar.
Los talibanes han confirmado el enfrentamiento pero según su versión muchos más policías murieron y en sus filas solo cinco hombres fallecieron.