Luego de una agotadora jornada en el Hard Rock Stadium en Miami, Estados Unidos, los jugadores peruanos decidieron despedirse de los hinchas y la prensa que los esperaba fuera de los camerinos.
Los seleccionados demostraron su felicidad y no dudaron en despedirse emotivamente de sus seguidores, a quienes les estrecharon las manos antes de partir del estadio. Definitivamente la mejor hinchada del mundo recibió uno de los mejores regalos de su selección.