Una impresionante vista de una nebulosa alrededor del cúmulo de estrellas NGC 1929 en la Gran Nube de Magallanes, galaxia satélite de la Vía Láctea, ha sido capturada por el Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral (ESO).
Esta verdadera “guardería estelar” está dominada por un ejemplar colosal que los astrónomos llaman una “superburbuja” y su forma se esculpe por los vientos de estrellas jóvenes y las ondas expansivas de las explosiones de supernovas.
La Gran Nube de Magallanes, donde las nubes de gas y polvo forman nuevas estrellas, contiene muchas regiones y una de ellas es la que domina esta nueva imagen del ESO, ubicado en la región de Antofagasta, en Chile. Así, estrellas jóvenes y calientes en NGC 1929 emiten una intensa luz ultravioleta que hace brillar el gas y este efecto permite que resalte la llamada “superburbuja”, un inmenso globo de material de unos 325 por 250 años luz de diámetro.
La estrella más cercana al sol se encuentra a poco más de cuatro años luz de distancia. La “superburbuja”, cuyo nombre oficial es LHA 120-N 44 ó N 44, se produjo por los vientos estelares (flujos de partículas cargadas provenientes de estrellas muy calientes y masivas en el cúmulo), que limpiaron la región central. Además, las estrellas masivas del cúmulo explotaron como supernovas y crearon ondas expansivas que empujaron el gas hacia afuera y formaron la brillante burbuja.
La imagen fue creada por ESO a partir de datos astronómicos encontrados por el argentino Manu Mejías, que participó en el concurso de astrofotografía Tesoros Escondidos de ESO 2010.
(Fuente: Agencias)