La NASA ha dado un impulso a la movilidad aeronáutica con el X-57 Maxwell, un avión de hélice bimotor de fabricación italiana, se trata de un prototipo de avión impulsado únicamente por energía eléctrica. El avión tiene solo un ala y es capaz de reducir drásticamente las emisiones de dióxido de carbono, así como la contaminación acústica. El modelo se está probando en un laboratorio aeronáutico en el desierto de California.
El X-57 funciona gracias a baterías eléctricas, lo que elimina la mayoría de las emisiones de dióxido carbono y reduce de forma considerable la polución sonora. El objetivo de la NASA es probar que resulta posible una aviación que no se base en el consumo de combustibles fósiles.
La agencia espacial espera probar que esta innovadora distribución de la potencia eléctrica reduce a la quinta parte los requerimientos de energía de un aparato que se desplace a una velocidad media de 280 km/h.