Varios países ya han anunciado tener casos con pacientes infectados con la viruela del mono: Estados Unidos, España, Portugal, Italia y Reino Unido. Esta situación ha encendido la alarma de otros países que aún luchan por controlar la COVID-19 que sigue afectando a muchas personas.
En nuestro país, el Ministerio de Salud (Minsa) ya emitió la alerta epidemiológica a los establecimientos de salud públicos y privados a nivel nacional a manera de prevención ante una posible llegada de la enfermedad. Mientras tanto, esta es la información más importante que se debe conocer de la Viruela del mono.
1. ¿QUÉ ES LA VIRUELA DEL MONO?
De acuerdo a expertos, esta enfermedad es una zoonosis, es decir, es transmitida entre animales vertebrados y el hombre, producida por un virus ADN. Sus síntomas son similares a los de la viruela, sin embargo, es menos grave, transmisible y letal que ésta.
Es una enfermedad endémica de África Central y Occidental, durante los últimos años se han reportado un incremento de casos, asimismo, hay reporte de casos importados esporádicamente en Reino Unido.
2. FORMA DE CONTAGIO
Mayormente el contagio se da por medio de la saliva y excreciones respiratorias, pero también por contacto con el exudado de una lesión o el material de la costra. Otras posibilidades de contagios son a través de las relaciones sexuales y las heces.
3. SÍNTOMAS
El tiempo de incubación de la enfermedad es de 7 a 14 días, pero también puede variar de 5 a 21 días. Los síntomas principales son fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, dolor de espalda, escalofríos, inflamación de los ganglios y agotamiento. Luego se presenta una erupción que inicia en la cara y se esparce a través del cuerpo.
Posteriormente la erupción se convierte en costras que terminarán por caer. El proceso de la enfermedad puede durar entre 2 a 4 semanas.
4. DIAGNÓSTICO
Para ello se deben tomar muestras de lesiones cutáneas de las costras y de la orofaringe. También se pueden usar pruebas moleculares mediante PCR para el diagnóstico.
5. ¿ES GRAVE, TIENE TRATAMIENTO?
Según investigaciones, la mayor tasa de mortalidad está en niños, jóvenes e inmunodeprimidos, así como en aquellas personas que no tienen la vacuna contra la viruela.
Por otro lado, las complicaciones más frecuentes son la sobreinfección bacteriana de las lesiones, la queratitis, la bronconeumonía, la sobreinfección corneal o la encefalitis.
Aún no se conoce un tratamiento específico para esta enfermedad. Lo que se suele administrar es de soporte, para controlar los síntomas y evitar las sobreinfecciones bacterianas.
Con información de RPP.