El ministro de Salud, Óscar Ugarte, señaló que la ley 31091 permite a los privados importar las vacunas contra la COVID-19, pero esto no debe significar un costo a los usuarios ni que se rompa con el cronograma de prioridades elaborado por el gobierno.
"Eso hemos planteado, y los representantes del empresariado con los que hemos conversado están de acuerdo, hacerlo en esas condiciones, en ese orden, y sin romper esa priorización que ha hecho el Gobierno", explicó Ugarte en una entrevista con RPP, refiriéndose a que este mecanismo legal rompa con el cronograma y, por ejemplo, un joven se vacune mucho antes que los adultos mayores, que se encuentran en la fase I de prioridad.
El ministro también descarto que existan trabas burocráticas para la importación de oxígeno, como lo sugirió el congresista de Fuerza Popular, Diethell Columbus. “Basta entrar a los mecanismos de información general y se va a encontrar varias empresas que venden. La empresa Hiraoka, por ejemplo, vende concentradores. El mercado está totalmente abierto”, explicó en RPP.