En plena era de la ciencia y la tecnología, el martes 13 sigue siendo un día marcado por la superstición para muchas personas alrededor del mundo, asociado tradicionalmente con la mala suerte. Pero, ¿Cuál es la razón detrás de esta creencia?
La superstición de esta fecha combina dos elementos culturalmente inculcados: el número 13, frecuentemente visto como de mala suerte, y el martes, considerado un día desfavorable en algunas tradiciones. Esta fecha se convierte en símbolo de temor irracional, aunque carezca de sustento científico.
"Las supersticiones son, en esencia, un intento de tener algún control sobre lo incierto. Se basan en la necesidad de asociar eventos con algo que nos brinde seguridad, aunque no haya evidencia que lo respalde", explicó un especialista en comportamiento humano a Préndete.
PUEDEN LLEVAR A TRASTORNO
Transmitidas de generación en generación, las supersticiones han intentado explicar lo inexplicable, y aunque muchas veces son inofensivas, pueden convertirse en limitantes si afectan la capacidad de una persona para llevar a cabo sus actividades diarias. "Si la superstición no interfiere en la vida cotidiana o en las interacciones con terceros, podría considerarse inofensiva. No obstante, si limita las acciones diarias, podría ser indicativo de trastornos psicológicos como el trastorno obsesivo-compulsivo o la paranoia", agregó.
Además del martes 13, existen otras supersticiones que seguimos casi de manera inconsciente, como romper un espejo, considerado un augurio de siete años de mala suerte, tocar madera para evitar la mala fortuna o el temor a los gatos negros.
"Vivir con miedo a que el martes 13 traiga desgracias solo predispondrá nuestra mente a buscar confirmaciones negativas que validen la superstición", concluyó el experto.
Las supersticiones persisten porque ofrecen una forma de enfrentar lo desconocido, pero es importante no dejar que dominen nuestro comportamiento diario. Empezar el día con una actitud positiva es lo ideal, sea martes 13 o cualquier otra fecha.