Con las vacaciones escolares a la vuelta de la esquina, una actividad ideal para disfrutar en familia y conectar con la naturaleza es la pesca deportiva. Esta disciplina no solo permite a los más pequeños aprender sobre los ecosistemas marinos, sino que también fomenta la responsabilidad y el respeto por el medio ambiente.
UN DEPORTE QUE ENSEÑA A VALORAR NUESTRAS ESPECIES MARINAS
A diferencia de la pesca comercial, esta actividad se enfoca en el disfrute del entorno natural y en la captura responsable de peces. Los pescadores, además de disfrutar del paisaje, buscan capturar, admirar y en muchos casos liberar los peces que no cumplen con los tamaños permitidos. "La pesca responsable es clave. Solo llevamos a casa lo que realmente necesitamos, devolviendo las especies pequeñas al agua", señalaron los expertos de Armaq Pesca.
Para iniciarse en la pesca deportiva, solo se necesita una caña, carnada y paciencia. Los equipos especializados permiten pescar sin dañar a los peces, lo que asegura que puedan ser liberados si es necesario. Esta actividad no solo fomenta la motricidad en los niños, sino que también ofrece una excelente forma de relajarse al aire libre.
Perú, con su rica biodiversidad, ofrece múltiples opciones para practicar la pesca deportiva, desde capturar lenguados en la costa, truchas en los ríos andinos, hasta especies en la selva. Las cañas varían según el tipo de lugar donde se practique: cañas más cortas para los ríos con arbustos o más largas en las lagunas con mayor espacio para maniobrar.