La crisis política y social que va enfrentando el Perú, desde diciembre del 2022, generó que Moody’s, la agencia calificadora de riesgo, cambie su perspectiva de calificación de riesgo de estable a negativa, tanto para sus créditos en soles como en moneda extranjera.
La calificadora de riesgo informó de su determinación por considerar que se intensificaron los riesgos sociales y políticos actuales que ponen en peligro la fortaleza económica de país en los próximos años.
Sin embargo, mantiene su calificación de Baa1 para el Perú, la cual Moody’s podría cambiar si la crisis política se intensifica aún más.
Moody´s se suma a Fitch y S&P, calificadoras que revisaron a la baja sus perspectivas de puntuación de riesgo de Perú, meses atrás.
LADO POSITIVO
Respecto al tema, el economista jefe de BBVA Research Perú, Hugo Perea, explicó que Moody’s siempre ha tenido a Perú con la mejor calificación de riesgo crediticio.
“No ha bajado la calificación crediticia, ha bajado su perspectiva de calificación, mantiene la calificación de Perú (en Baa1)”, declaró a diario Correo.
Perea indica que esto no significa que Perú tenga problemas de desbalance fiscal o problema monetario, porque sus indicadores macroeconómicos siguen mostrando fortaleza. Entre esos indicadores macrooeconómicos positivos está la deuda pública, que está por debajo del 40%, así como su déficit fiscal (gastos versus ingresos), que cerró en el 2022 por debajo del 2%.
Perú todavía tendría respaldo financiero que le permite solventar el pago de sus compromisos crediticios. No obstante, el riesgo de la crisis política y social puede provocar que disminuya sus ingresos por el menor crecimiento de su producción.