Desde hace 47 años, el asentamiento humano Cerro El Pino es considerado una de las zonas más peligrosas de Lima, incluso es famoso por ser una guarida de delincuentes y de drogadictos.
Este lugar que empezó como un refugio de migrantes, encierra en sus estrechas calles numerosas historias de superación, pero también de violencia.
Durante le tiempo que duró el reportaje, no se observó la presencia de policías o patrullaje de serenos. Sin embargo, los vecinos han decidido organizarse para reducir la peligrosidad que rige en esta zona.