Audios y mensajes escritos, con fotografías incluidas, difundidas a través de las redes sociales generó una psicosis colectiva en Huaycán. Más de 300 pobladores, completamente descontrolados, intentaron linchar a dos encuestadores acusándolos de traficantes de órganos.
Los pobladores también atacaron y destrozaron cuanto objeto encontraron en los alrededores de la comisaría del distrito. Una persona muerta fue el saldo de tan lamentable tragedia social.
Producto de estos actos de vandalismo, se detuvo a 34 personas. El Poder Judicial dictó prisión preventiva para estos sujetos sindicados como presuntos autores de los desmanes que se registraron el pasado jueves.