A sus 73 años, Valeriana Alhuirca de Flores es un ejemplo de superación en el pueblo de Ichupampa, provincia de Caylloma, región Arequipa.
Gracias al proyecto Haku Wiñay del Fondo de Cooperación de Desarrollo Social (Foncodes), programa nacional del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis), ella es una emprendedora reconocida como “la reina de la miel del Cañón del Colca”.
El proyecto les facilitó las abejas, fuelles, cajas de madera, guantes, indumentaria y máscaras protectoras a prueba de picaduras, entre otros, así como conocimientos y técnicas para lograr una mayor productividad.
La abuelita de Ichupampa recuerda que Foncodes le informó sobre el proyecto y la impulsó a generar un emprendimiento, el cual hoy se expandió a nivel provincial y busca abrir mercados en toda la región arequipeña.
“Ni en mis sueños imaginé que hoy sería dueña de mi propio negocio, recibí el apoyo de las ingenieras, me explicaron sobre la importancia de la asociación y capacitación. Ya hemos participado en concursos y con la rica miel hemos ganado. Gracias a Foncodes puedo decir que puedo generar mis propios ingresos económicos”, expresó Valeriana Alhuirca.
400 hogares involucrados
Ulderico Figueroa Torre, director ejecutivo de Foncodes, afirmó que el Midis, a través del proyecto Haku Wiñay fortalece los sistemas de producción familiar, promueve la vivienda saludable, impulsa negocios rurales inclusivos y fomenta las capacidades financieras de las familias rurales.
Explicó que, en la comunidad de Valeriana y otras localidades aledañas, el proyecto trabaja con 400 hogares organizados con el Núcleo Ejecutor Central (NEC) Colca, con una inversión de 2 millones de soles, intervención que se encuentra en su fase final luego de 3 años intervención de este proyecto productivo.
La inversión acumulada de Haku Wiñay en la región Arequipa asciende a más de 11 millones de soles, y se elevará a casi 17 millones con dos nuevos proyectos en los distritos de Cahuacho y Andagua.
La reina de la miel del Cañón del Colca destacó el soporte técnico que recibe. “Han venido varios jóvenes para enseñar y aunque a veces algunas cosas nos hemos olvidado, tienen mucha paciencia para explicarnos cómo conservar las abejas. Invito a otras personas a ser parte del proyecto y hacer sus sueños realidad a pesar de la edad”.