Los niños y adolescentes son unos de los grupos vulnerables más afectados de la población por la emergencia sanitaria desatada por la pandemia del nuevo coronavirus COVID-19 y según un estudio presentado en julio pasado en el foro virtual Evidencias, Perspectivas y Desafíos de la Salud Sexual y Reproductiva en el Perú en Tiempos del COVID-19, durante este periodo, los embarazos adolescentes aumentaron en un 12%.
“Esto tiene una repercusión directa con el incremento de la muerte materna debido a las restricciones para acceder a métodos anticonceptivos modernos, consulta y consejería en caso de los adolescentes”, señaló Guillermo Atencio, titular de la Dirección Nacional de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud (Minsa) a un diario local.
Solo a inicios de julio, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) informó que, entre marzo y junio de este año, la Línea 100 recibió 67,712 casos de violencia familiar y abuso sexual.
Cabe señalar que de ese total, unas 17 mil estaban relacionadas a actos de violencia y abuso sexual cometidos en contra de niños, niñas y adolescentes.