Desde un inicio reconoció su responsabilidad, “Sí, yo lo maté y no me voy a correr”, dijo Julio Flores (59) al ser intervenido por los agentes policiales, el suceso se registró en el sector Santa María, en Chosica.
El hombre dijo que asesinó a su jefe con una escopeta tras una fuerte discusión. Flores era agente de seguridad de su empleador, Francisco Rondón Cancino, quien se dedicaba al alquiler de maquinaria pesada, informa Ojo.
La hermana del detenido, entre lágrimas, dijo que él mató a su jefe por las constantes humillaciones que sufría: “lo trataba como si fuera un estropajo, no le pagaba y lo hacía beber licor”, denunció.