Las autoridades intervinieron, el último domingo, a unas 400 personas en un club campestre de Chosica, por no respetar la distancia social y la prohibición de reuniones, medidas implementadas para enfrentar el aumento de casos de Covid-19.
De este grupo, al menos 200 personas (hombres, mujeres y niños) sin medir el peligro participaban de un bautizo evangélico masivo en la ribera del río Rímac, pese a que su caudal ha aumentado considerablemente en las últimas semanas.
Según se conoció, en el lugar las personas estuvieron “aglomeradas” y varios de ellos no llevaban mascarillas, pese a sus reclamos todos fueron trasladados a la comisaría. El municipio de Lurigancho-Chosica multó y clausuró el local intervenido.