Continúan los experimentos sociales en “La Noche Es Mía”. Esta vez, el equipo de producción del programa salió a las calles para poner a prueba el espíritu solidario de los peruanos cuando se le malograr el auto a una mujer. Lo curioso es que la prueba se practicó con dos jóvenes diferentes: una en minifalda y con apariencia de modelo y la segunda no tan agraciada.
Cuando a esta última se le avería el carro en una transitada avenida, nadie tuvo la cortesía de acercarse para poder ayudarla. Por eso, ella misma tuvo que pedir apoyo a los transeúntes que pasaban por el lugar, pero sus esfuerzos fueron en vano porque tampoco quisieron socorrerla.
Sin embargo, todo lo contrario sucedió con la primera joven. A ella también se le malogró el carro en una vía pública y sin necesidad de pedir ayuda a nadie, varios curiosos se le acercaron y le ofrecieron apoyo. Incluso, hubo conductores quienes se detuvieron para decirle que llevaban a su trabajo. ¿Por qué esa diferencia con una y otra persona?