Un padre de familia denunció que su hijo de ocho años fue expulsado de un nido por el solo hecho de tener autismo. Aseguró que las autoridades de la institución no dejan ingresar al menor, quien incluso habría sufrido de discriminación.
Una cámara de seguridad registró al niño corriendo por la calle luego que lo habrían dejado salir de la institución. El escolar cruza la pista y por poco es atropellado por un auto negro.
El abogado Mario Amoretti, propietario del nido, rechazó tal acusación y dijo que nunca separaron al pequeño. También negó que se haya registrado algún tipo de discriminación contra el menor.