El presidente ecuatoriano se mostró indignado por las reacciones de júbilo en todo el mundo por la muerte del exlíder libio. Explicó que, al margen de los crímenes cometidos por Gadafi, los derechos humanos deben ser respetados.
“No es que defendamos al régimen de Gadafi, defendemos la soberanía de los países, la no intervención", indicó Correa durante la emisión de su programa sabatino.
“¿En qué mundo estamos?” se preguntó el mandatario, cuestionando también la actuación de la OTAN al intervenir en Libia, armando a los rebeldes y bombradeando a las fuerzas de Muamar Gadafi.
Señaló que existe una “doble moral” en los países miembros de la OTAN, ya que nunca intervinieron contra Pinochet o los militares dictadores de Argentina y Uruguay, presuntamente porque estaba en juego los intereses económicos.