Ucrania aceptó este martes un alto el fuego de 30 días tras la reunión diplomática en Yeda, Arabia Saudí, donde Estados Unidos propuso la tregua como parte de una estrategia para frenar el conflicto. Sin embargo, Rusia aún no ha confirmado su participación y continúa su ofensiva en el este del país, lo que genera dudas sobre la viabilidad del acuerdo.
KREMLIN DUDA DE LA TREGUA
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, señaló que Rusia espera recibir más detalles de Washington antes de pronunciarse. Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zakharova, afirmó que la postura de Moscú “no vendrá del extranjero”, sino de la propia Federación Rusa. Mientras tanto, las tropas rusas han tomado dos localidades en Donetsk y han obligado a la retirada de soldados ucranianos en la región fronteriza de Kursk.
ESTADOS UNIDOS REANUDA AYUDA MILITAR
Los aliados occidentales de Kiev respaldaron la tregua y exhortaron a Rusia para que acceda a la tregua. En tanto, Polonia señaló que se habría reanudado el suministro de armas de Estados Unidos a Ucrania desde el centro logístico polaco de Rzeszów (sur), además la empresa de tecnología aeroespacial estadounidense Maxar ha reactivado la transferencia de datos de inteligencia a Ucrania, como resultado de las negociaciones de paz de Yeda.
NUEVOS ATAQUES CON DRONES Y MISILES
A pesar del intento de negociación, los ataques continúan. Rusia lanzó 98 drones kamikaze sobre territorio ucraniano, todos derribados por las defensas de Kiev. Sin embargo, misiles balísticos impactaron en las ciudades de Krivi Rig y Odesa, dejando al menos cinco muertos. La intensificación de los bombardeos pone en duda la efectividad de la tregua propuesta.
Fuentes anónimas rusas cercanas al gobierno afirmaron que es difícil que el presidente Vladimir Putin acepte la tregua en su forma actual, ya que el ejército ruso está ganando terreno.
