Pese a que la presidenta Dina Boluarte ha manifestado su interés en que se debata la incorporación de la pena de muerte en el Código Penal, los representantes peruanos votaron en contra de esta iniciativa a nivel internacional, durante la última Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La delegación peruana, encabezada por el diplomático Enrique Roman Morey, se mostró a favor de la moratoria de dicha medida, lo que implica que la posición de nuestro país está a favor de suspender el uso de la pena capital como castigo en los códigos penales del mundo.
Chiara Sangiorgio, de Amnistía Internacional, destacó la importancia que tienen estas resoluciones en los países de todo el mundo.
“Esta votación supone un importante punto de inflexión para países de todo el mundo y demuestra que los Estados miembros de la ONU están cada vez más cerca de rechazar la pena de muerte como castigo legal en virtud del derecho internacional”, dijo a Infobae.
En dicha sesión, 130 delegaciones, entre las que se encuentran Antigua y Barbuda, Kenia, Marruecos y Zambia, votaron a favor, 32 en contra, como Mauritania y Papúa Nueva Guinea, y 22 en abstención como Guinea y Uganda.
MINISTRO DE JUSTICIA SOBRE PENA DE MUERTE
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Eduardo Arana, se pronunció sobre la moratoria aprobada en el Consejo de las Naciones Unidas sobre la pena de muerte, destacando que la posición del Estado peruano es coherente, dado a que se acoge a la disposición de poner en debate esta medida.
"Otro aspecto que ha llamado la atención de la ciudadanía está relacionado con la moratoria de Naciones Unidas sobre la pena de muerte. Algunos entendidos han señalado que esto contradice la posición del Ejecutivo. La moratoria surge como una medida para que los países no consideren la pena de muerte como una posibilidad", indicó, según el diario La República.
“Es pertinente observar que la propia Organización de las Naciones Unidas ha enfatizado la necesidad de debatir sobre la pena de muerte. (…) Es decir, Naciones Unidas ha exhortado a los Estados a convocar debates. Frente a ello, se ha llegado a un acuerdo que señala lo siguiente: 'Se acoge con beneplácito las iniciativas y el liderazgo político para alentar debates nacionales destinados a dejar de aplicar la pena de muerte a nivel nacional'. Eso es lo que estamos haciendo con la reciente resolución ministerial (…). Este debate no tiene como propósito apoyar o rechazar la medida. Estamos promoviendo un espacio para que se conozca la posición de los políticos, de la academia, entre otros (…)", agregó.