Madre y abuela. Ana Obregón es una actriz española de 68 años que ha desatado gran polémica en el país europeo, luego que el pasado 5 de abril anunció al mundo la llegada de su nieta Ana Sandra, bebé engendrada con el semen de su hijo fallecido, a través de la gestación subrogada. Esta decisión ha generado mucho que hablar, porque esta práctica médica es considerada como "explotación reproductiva de mujeres", de acuerdo a organizaciones feministas. Además, es que es ilegal en la misma España.
“Es hija de Aless y cuando crezca le contaré que su padre fue un héroe, para que sepa quién es y lo orgullosa que tiene que estar de él. Esta fue la última voluntad de Aless, la de traer un hijo suyo al mundo”, declaró Obregón en una exclusiva entrevista a la revista ¡Hola!.
De acuerdo a la socialité, en 2018, cuando le diagnosticaron cáncer a su hijo Alessandro Lequi, los médicos le recomendaron al joven guardar una muestra de su esperma, por si los medicamentos le afectaban en un futuro.
Dichos restos se almacenaron en un laboratorio en Estados Unidos, hasta que, en sus últimos días, Lequi les dijo a sus padres que “quería dejar descendencia en esta vida”. “Desde ese momento, lo único que me ha permitido seguir viviendo cada día, cada segundo, es cumplir la misión de traer al mundo a una hija de Aless”, admitió la actriz.
Así inició un proceso de tres años, el cual consistió en múltiples trámites legales y algunos fallidos intentos, hasta que se consiguió fecundar a la madre subrogada, a quien, de acuerdo a la revista Lecturas, se le pagó cerca de US$38.000 de los US$180.000 que habría costado el procedimiento.
Por el momento, la artista y su nieta permanecen en EE. UU. hasta que la menor obtenga sus papeles para viajar. “La niña ha nacido en América y va a tener pasaporte americano y doble nacionalidad. Legalmente, es mi hija y así aparece en su pasaporte. La registraré en el Consulado español y luego puedo traerla a casa”, declaró.
SERÍA ILEGAL EN ESPAÑA
En España, la Ley 14/2006 de 26 de mayo sobre Técnicas de Reproducción Asistida hace referencia en su artículo 9 a la posibilidad de que el marido o pareja de la persona que se está sometiendo al tratamiento de fertilidad puede prestar consentimiento para que su semen pueda ser utilizado en los 12 meses siguientes al fallecimiento para fecundar a su mujer o pareja. Sin embargo, se precisa que ese material reproductor nunca podrá ser utilizado para concebir un hijo por gestación subrogada dado que dicho contrato es nulo de pleno derecho en España, donde es ilegal esta práctica.
Por tanto, puntualizan que el consentimiento para que otras personas puedan hacer uso del material genético del hombre fallecido "no tiene cabida en España" puesto que para ello sería necesaria la gestación subrogada.
