El papa Francisco habló de una humanidad insaciable de dinero y poder que devora a los más débiles y causa las guerras, durante la homilía de la misa del gallo celebrada anoche en la basílica de San Pedro, Ciudad del Vaticano.
Asimismo, el Santo Padre criticó que "después de muchas Navidades celebradas entre adornos y regalos, después de tanto consumismo que ha envuelto el misterio que celebramos (...) se ha olvidado su verdadero significado".
Urbi et Orbi
Debido a sus problemas de rodilla, que lo aqueja desde hace varias semanas, el papa Francisco permaneció sentado a un lado del altar y fue el cardenal Giovanni Battista Re el encargado de celebrar la eucaristía, ante unas 7.000 personas.
Jorge Bergoglio volverá hoy a asomarse al balcón de la basílica de San Pedro del Vaticano, igual que cuando fue elegido papa en 2013, para leer su mensaje de Navidad e impartir la tradicional bendición "Urbi et Orbi" (a la ciudad y al mundo).
