El gobierno de Florida, en Estados Unidos, anunció que interpuso una demanda contra la administración del presidente Joe Biden por obligar a los empleados del gobierno a vacunarse contra la COVID-19.
El gobernador republicano, Ron DeSantis, dijo en una rueda de prensa que esta orden es "ilegal" y una "extralimitación" que interfiere con las políticas de empleo y la economía del estado.
"Lo que hace Biden es inconstitucional", indicó, añadiendo que esta obligación es realmente "una opción personal" y que pone en riesgo el trabajo de miles.
La demanda fue anunciada además por la fiscal estatal, Ashley Moody. 21 fiscales estatales y republicanos ya habían enviado una carta a Biden criticando la obligatoriedad.
Este se trata de un nuevo capítulo en el enfrentamiento que mantiene Washington con Florida, opuesto a la imposición de mascarillas y a la obligación de vacunas.