En Haití, un grupo de pandilleros secuestró a 17 personas de origen estadounidenses que participaban de una misión religiosa en el país centroamericano. Entre los secuestrados había 3 menores de edad.
Según autoridades de EEUU, las víctimas se movilizaban para volver a su país, luego de participar en la construcción de un orfanato, cuando fueron interceptados por los desadaptados. Este suceso se produce apenas unos días después de que altos funcionarios estadounidenses recorrieran suelo haitiano y prometieran más recursos para la Policía Nacional de esa nación.
Se trata de la banda denominada “400 Mawozo”, una de las más peligrosas del Haiti, los mismos que en abril pasado secuestraron a diez personas, y tiene en su mira a las iglesias y las organizaciones religiosas.