En Estados Unidos, una mujer trans, recluida en una prisión de hombres en Georgia, solicitó a un juez la traslade de inmediato a un penal para mujeres, pues denunció que ha sido agredida y abusada sexualmente en 16 ocasiones.
El caso de Ashley Diamond, una mujer transgénero afroamericana, violada dentro del Departamento Correccional de Georgia fue dado a conocer por Southern Poverty Law Center, una organización de derechos humanos.
“Las acciones de Georgia hacia mí y otros prisioneros trans son un abuso sistémico de poder de autoridad”, señaló la denunciante, de 44 años. Afirma que fue abusada sexualmente por guardias y reclusos.
Con la asesoría de sus abogados, Diamond pidió una orden de emergencia para proteger su salud y seguridad mientras permanece en el Departamento Correccional de Georgia, donde está detenida desde octubre de 2019.