El director del laboratorio del Instituto de Virología de Wuhan, Yuan Zhiming, negó tajantemente que el COVID-19 haya salido de este lugar. "Sin autorización, ni siquiera un mosquito puede colarse en el laboratorio y ninguno de nuestros investigadores puede sacar ni una gota de agua ni un trozo de papel", dijo.
Su descargo fue dado en una entrevista para la cadena CGTN, a la que permitió visitar las instalaciones, que afirma tienen un nivel superior de bioseguridad, rechazando las acusaciones de que fuesen causantes de la propagación del virus.
El científico manifestó que dichas medidas de seguridad se implementaron cuando el brote del SARS vulneró el sistema de salud, por lo que decidieron crear un laboratorio seguro.
La aparición de esta enfermedad y que se demorase en dar aviso de su letalidad, hizo que Estados Unidos y Australia, entre otros países, acusen a China de falta de transparencia y pidieron una investigación internacional sobre el origen del coronavirus.
