En Corea del Norte, el periódico oficial, el Rodong Sinmun, ha señalado que cualquier intento de infringir la dignidad y supervivencia del país comunista será reprimido con un ataque "inmediato y potente", instando a realizar esfuerzos supremos para fortalecer su capacidad de defensa nacional.
Durante la reunión del Comité Central del gobernante Partido de los Trabajadores, celebrada a fines de diciembre, el presidente del Comité de Asuntos de Estado norcoreano, Kim Jong-un, amenazó diciendo que el mundo pronto será testigo de una "nueva arma estratégica", y advirtió sobre una "acción real impactante", acusando a Estados Unidos de intentar ganar tiempo para sus propios intereses políticos.
Kim agregó que no ve motivo para mantener su compromiso de suspender las pruebas nucleares y de misiles de largo alcance, indicando que no se logrará la desnuclearización de la península coreana hasta que Estados Unidos revierta su política hostil contra Pyongyang.
Cabe indicar que Kim había establecido precisamente el final de 2019 como plazo para que el gobierno de Donald Trump relajara las sanciones económicas contra su país.