El video de un hombre pescando en el embalse Upper Coliban, ubicado en Australia, rápidamente se ha viralizado en las redes.
La razón fue porque esta persona realizó dicho accionar, sentado en una silla que estaba sujetada con cables a un enorme drone que lo elevó varios metros del agua, logrando de esta manera capturar un pez.
Sin embargo, para la Autoridad de Seguridad de Aviación Civil (CASA por sus siglas en inglés), este hecho podría conllevar a una multa de comprobarse infracciones severas de las regulaciones de aviación, la misma que ascendería a 10 mil dólares e incluso acarrear un proceso judicial.
“Nos tomará tiempo reunir la información, analizar todo eso, determinar cuál es el curso de acción apropiado”, detalló Peter Gibson, representante de dicha entidad.
Otra persona que tiene conocimientos sobre estos temas es Ross Anderson, director general de Aviassit, una empresa dedicada a la capacitación, licencia, auditoría de drones, quien precisó que en Australia las normas no son tan rigurosas para operar uno de estos aparatos.
Asimismo, resaltó que ha sido una suerte que este individuo que decidió pescar de esta manera, no haya resultado herido. “Para la persona en la silla, el riesgo podría ser errores de la computadora donde el avión vuela, podrían ser fallas del motor donde el avión termina en un estado incontrolable”, manifestó en declaraciones a ABC.
En respuesta Gibson, aseguró que las leyes de Australia para el uso de drones son exhaustivas. “Por supuesto, los mantenemos bajo revisión en todo momento, porque los tipos de drones están cambiando, la forma en que se utilizan los drones está evolucionando”, agregó. (Fuente: El Comercio)