Cuco era un perro, de 15 años, que vivía en la Asociación Protectora de Animales de Vilagarcía de Arousa, en Pontevedra. El pasado sábado 10 de agosto fue encontrado sin vida por una de las voluntarias del lugar. ''Se había quedado dormido durante la noche y ya no despertó'', contó la presidenta de la fundfación, Ángeles Cifuentes.
Más allá de su fallecimiento, lo llamativo es que sucedió unas horas antes de que muriera su dueña, una anciana que había pasado los últimos años en una residencia para personas mayores. ''Cuando descubrimos que la propietaria había fallecido por la noche el mismo día que Cuco, nos quedamos impactados, se nos pusieron los pelos de punta. Nosotros creemos que se fue delante de ella para guiarla'', relató Cifuentes.
Los últimos cinco años, el perro había quedado a cargo de un familiar de la mujer, pero ella siempre mantuvo el contacto con Cuco. ''La mujer cuidaba muy bien de él así como de una colonia de tres gatos que vivían en la calle'', confirmó Cifuentes.
Sin embargo, en febrero, ''la persona que se quedó a cargo del perro tras ingresar su dueña en el geriátrico lo trajo a la protectora porque ya no estaba en condiciones para cuidarlo''. Sus cuidadores cuentan que el perro se mostraba tranquilo y sociable. Cuco pronto se adaptó a la protectora, cuyo personal ''siente debilidad por los lactantes y los ancianitos'', agregó Ángeles.