En Japón, el elefante más longevo de dicho país y el mundo murió el último jueves a los 69 años, de los cuales 67 los pasó en una estricta soledad en su hábitat del Parque Zoológico de Inokashira, en Tokio. El paquidermo de gran tamaño se llamaba Hanako (niña flor en japonés) y era conocida por todos como el elefante más triste del mundo.
Según la versión de sus cuidadores, Hanako fue encontrada muerta en el suelo de su cubil alrededor de las 3 de la tarde, aunque por la mañana ya mostraba síntomas que hacían presagiar su próximo deceso. De acuerdo al portal La Vanguardia, hace décadas que había perdido todos sus dientes y durante los últimos años sufría problemas digestivos.
Este elefante se hizo famoso hace poco más de una año cuando se conoció su curiosa y triste historia. Y es que Hanako llevaba más de 60 años sin ver a otros elefantes, encerrada en un hábitat de concreto sin pasto ni árboles. Incluso algunos activistas hicieron una campaña para que el enorme animal sea trasladado a un lugar donde pueda interactuar con otros ejemplares de su especie.
Hanako nació en Tailandia en 1947 y fue enviada en un principio al Zoo Ueno de Japón con sólo 2 años de edad como regalo del Gobierno tailandés, según el Japan Times. Allí reemplazó a los elefantes que murieron de hambre durante la Segunda Guerra Mundial. “Es una gran lástima. Hanako era el símbolo de la paz y el desarrollo de Japón tras la Segunda Guerra Mundial”, declaró un representante del zoológico.