Finlandia era hasta ahora el único país nórdico que no reconocía el matrimonio a las parejas del mismo sexo, un derecho que fue aprobado en Suecia y Noruega en 2009, en Islandia en 2010 y en Dinamarca en 2012.
El Parlamento finlandés aprobó este viernes la legalización del matrimonio homosexual por 105 votos a favor y 92 en contra y acordó reformar la actual normativa para autorizar los enlaces entre personas del mismo sexo.
La propuesta de reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo dividió a la coalición de Gobierno y a los partidos políticos, que habían concedido libertad de voto a sus diputados al considerar que se trataba de una cuestión de conciencia.
Las tres fuerzas mayoritariamente favorables a la nueva ley fueron los Verdes y la Alianza de Izquierdas, socios hasta hace unos meses de la coalición gubernamental, junto con los socialdemócratas, mientras que casi todos los diputados centristas, democristianos y ultranacionalistas se opusieron.
El resto de partidos, entre ellos el conservador Kokoomus del primer ministro Alexander Stubb, estuvieron más divididos, aunque la mayoría de sus diputados votaron a favor de la nueva ley.
El cambio legislativo aprobado hoy tiene su origen en una iniciativa popular presentada en 2013 que recogió 167.000 firmas, más del triple de las necesarias, lo que forzó su tramitación parlamentaria.