En Michigan, Estados Unidos, un hombre de 54 años de edad murió tras ser picado por unas 60.000 abejas. El lamentable hecho sucedió luego de que estrellara su auto contra una vivienda abandonada, la misma que servía de guarida para los insectos.
La colisión destruyó el tejado provocando que las abejas se precipitaran sobre el automóvil. Hubo varios testigos que intentaron ayudar al hombre, pero la 'tormenta' de abejas hizo imposible que pudieran acercarse a menos de diez metros del coche.
Según el diario 'Independent', la casa no había estado ocupada en años, nadie había entrado en ella durante un largo periodo de tiempo y se sabía que estaba infestada de abejas.