El hecho, pese a que no dejó heridos, ha vuelto poner en entredicho la seguridad en la ciudad, a solo unos meses del Mundial Brasil 2014. En Río de Janeiro además se jugará la final del torneo internacional en el mítico estadio Maracaná.
El atraco ocurrió en el Norte D’Or, un hospital privado ubicado en Cascadura, barrio de la zona norte de Río de Janeiro. Los asaltantes sometieron a los pacientes, familiares y personal médico, despojándolos de sus objetos particulares, principalmente teléfonos móviles, joyas y dinero.
A parte de la recepción, los pistoleros llegaron a ingresar a otras salas del hospital, como el sector de emergencias, para buscar a nuevas víctimas. Los asaltantes permanecieron menos de cinco minutos en el nosocomio antes de huir con rumbo desconocido en varios vehículos.
