Una vez más los animales muestran su gran lealtad. En China, a un perro no le interesó soportar temperaturas de menos trece grados con tal de permanecer al lado del cadáver de su amigo que había sido atropellado por un vehículo.
A pesar del frío intenso y del riesgo de también ser atropellado, este animalito permaneció por horas en el lugar, de seguro esperando que su compañero se levantara para continuar con sus traviesas andanzas, algo que no pasó.
Los vecinos de la ciudad de Yinchuan en un emotivo gesto colocaron una silla para alertar a los conductores de esta transitada vía. Sin embargo, nadie se atrevió a recoger el cuerpo del animal ni de darle cobijo a su amigo.
Tuvo que llegar un trabajador de la zona para recoger el cuerpo del perro muerto y luego enterrarlo bajo el árbol de un parque. Unas personas se hicieron cargo del valeroso can que con su acto conmueve al mundo.