El mundo de las grandes empresas sigue girando. Disney compró por 52 400 millones de dólares los estudios de cine y televisión de Twenty-First Century Fox, un acuerdo que incluye no solo el contenido de Fox, sino su red de distribución internacional y sus canales de televisión.
Disney también tendrá mayor control sobre Hulu, la plataforma streaming de ABC, Fox, NBC y Time Warner. Incluyendo las deudas que asumirá Disney, el valor total de la compra llega a 66 100 millones de dólares. Como ocurrió con Pixar, Marvel y Lucasfilm, el traspaso será vía intercambio de acciones.
Los propietarios de Fox también controlarán el 25% del capital de Disney cuando se complete la venta. La familia Murdoch, actualmente con una participación del 39% en Fox, tendrá el 5% en la nueva Disney.
De esta forma, aspira a enfrentar a creadores de contenido como Amazon, Netflix, Google y Facebook, por lo que podría dar un vuelco en el equilibrio de poder en Hollywood. Disney adquiere los derechos de X-Men, Fantastic Four y Avatar.
Cuando Disney compró Marvel Entertainment hace ocho años por 4300 millones, Fox consiguió retener los derechos de las mencionadas y lucrativas franquicias, que finalmente permitirá a la empresa del ratón explotar a personajes como Deadpool y Wolverine.
Desde hace dos años, Disney atraviesa una reducción progresiva de los abonados al cable en Estados Unidos que afectó a canales como ESPN y ABC. Por otro lado Google, Amazon, Facebook, Twitter y Verizon compiten por los derechos para transmitir eventos deportivos en directo.
En su última presentación de resultados, el gigante anunció que su servicio streaming comenzará a funcionar en 2019. La suscripción será más barata que la de Netflix, de donde además está retirando contenido.
La compra le permitirá no solo duplicar su participación en Hulu, sino combinar películas, series y contenido deportivo con Fox. El mundo de Disney ya ha absorbido al universo Marvel, los estudios de animación Lucas Films y a Pixar.
