Algunas personas tienen sueños sencillos, otras inalcanzables o hasta fantásticos, solo posibles en la imaginación. El de Renato Barros era uno de estos últimos, sin embargo, por más increíble que parezca, logró hacerlo realidad. Luego de algunos años dice por fin haberse convertido en rey. Una pequeña isla es el territorio que esta bajo su domino y su reinado. Esta es su insólita historia.