Tras el derrumbe de la Fortaleza de Kuélap, en abril, el turismo en Amazonas está en alerta roja.
La lentitud de los trabajos de reconstrucción ha generado que el 50% de los operadores turísticos de la zona, como restaurantes, hoteles y agencias de viajes estén por irse a la quiebra.
Según la Cámara de Turismo de Amazonas, varios empresarios optaron por cerrar sus negocios debido a la poca afluencia de viajeros.
“A nivel nacional han desaparecido 180 mil microempresas como la mía, en el rubro turístico. Aquí en el Tingo, de lo que había 20 restaurantes, hay como cinco o seis nada más”, detalló uno de los afectados.
RESERVAS CANCELADAS
El presidente de la Asociación de Guías de Turismo, José Yajas Soplín señaló que el Ministerio de Cultura no les ha brindado ningún tipo de información sobre cuando terminarán los trabajos de reconstrucción de la fortaleza.
“Está un poco bajo este año el turismo en nuestra zona. Nos anunciaban que va a haber bastantea fluencia, pero no hay, está bastante bajo”, indicó una de las artesanas.
Desde el mes de abril, solo llegaron 700 turistas a Amazonas y se estima que el 90% de las reservas a este destino han sido canceladas.