Un hecho indignante se produjo en las afueras del hospital nacional Guillermo Almenara, donde una mujer que se gana la vida vendiendo desayunos recibió un baldazo de agua con lejía en el rostro por parte de la esposa de una funeraria.
Según la denunciante, ella y su pareja estaban trabajando como todos los días, cuando una mujer sale de la funerario "Bonilla" pidiéndole que se retire del lugar porque iba a baldear la vereda, ante la negativa de la víctima, la iracunda mujer, sin ningún reparo, le arrojó el agua con lejía en el rostro y en gran parte del cuerpo.
Pero eso no es todo, la víctima señaló que su pareja también fue golpeado por el esposo de la agresora y dueño de la funeraria, a quien le reclamó por estar grabando lo que hacía su cónyuge. Ambos vendedores terminaron con lesiones y la mujer correría riesgo de perder la visión por las secuelas que le podría dejar este cobarde ataque.
DENUNCIAN HOSTIGAMIENTO
Asimismo, la agraviada y su pareja denunciaron que desde hace tiempo vienen siendo víctimas de hostigamiento por parte de los dueños de la funeraria, quienes desean sacarlos del lugar donde trabajan a como de lugar.
"Mandan a los señores de la Municipalidad para que me retiren de aquí", relató la víctima, quien además precisó que el incidente inició por unas carrozas de la funeraria que estaban mal estacionadas e impedían el libre tránsito de vehículos y peatones.
Un equipo de Dilo Fuerte buscó a los dueños de la funeraria para conocer su versión de los hechos, sin embargo, presuntos trabajadores trataron de forma hostil a la reportera y su camarógrafo, e incluso, trataron de impedir que se continúe grabando.
