La próxima edición de Roland Garros, retrasada a septiembre a causa de la pandemia del nuevo coronavirus COVID-19, se jugará con público, aunque con solo el 60 % del aforo total, indicó la Federación Francesa de Tenis (FFT).
"El número de espectadores admitidos en el estadio será de entre el 50 y el 60 % de la capacidad habitual", indicó la FFT, que señaló que con esa reducción se posibilitará que se respeten las medidas de seguridad sanitaria para evitar la propagación del virus.
Durante el torneo, programado entre el 21 de septiembre y el 11 de octubre próximos, se tomarán otras precauciones que irán adaptándose a la evolución de la pandemia, en coordinación con las autoridades sanitarias francesas.
La FFT pondrá a la venta las entradas a partir del próximo día 9 para los federados y una semana más tarde para el público en general.
Cabe indicar que los jugadores y sus equipos técnicos también serán sometidos a un protocolo sanitario específico que será comunicado después.