La tradición de no comer carne el Viernes Santo se remonta al origen de la crucifixión de Jesús. Para la comunidad cristiana la Semana Santa es la más importante porque creen que Cristo murió en la cruz para liberar a la humanidad. Dicho acto le otorgó la posibilidad de vida eterna en el cielo.
“Se eliminaba los platos fuertes como la carne porque era considerada como un manjar, además de ser muy nutritivo. Algo que iba en contra de lo que se buscaba, que era ayunar para disminuir la fuerza física para que el cuerpo se dedique a lo espiritual”, explicó el sacerdote José Squadroni.
“El origen es la Cuaresma”, agregó, y explicó: “El sentido era estar casi en ayuno, bebiendo agua y comiendo pan y verduras durante cuarenta días orando para acercarse a Dios”.
Carnaval: adiós a la carne
El sacerdote jesuita expresó que antes de ingresar al ayuno que termina el Domingo de Pascua, inicia el festejo de Carnaval “tres días antes”. “El origen en latino es 'carnevale', que quiere decir adiós a la carne”, concluyó.