Marcas que difícilmente son borradas con el tiempo. El uso de los artefactos pirotécnicos hace que los niños y adolescentes corran el riesgo de quedar postrados en una cama de hospital por meses e incluso años, puesto que deben pasar por rigurosas intervenciones quirúrgicas.
Cerca de 400 niños fueron intervenidos el 2015, y el 30% de estos fue por uso de pirotecnia. El Hospital del Niño está actualmente trabajando en la prevención de estas situaciones, puesto que es una quemadura que puede ser evitada. La pólvora no solo daña por la quemadura, ya que los pacientes muchas veces ingresan por amputación de dedos, manos y miembros inferiores. Solo en diciembre ya se han recibido más de 8 niños con quemaduras por uso de pirotécnicos.