En medio de un inmenso dolor, fueron despedidos los seis soldados que fallecieron ahogados el último domingo cuando cruzaron el río Ilave en Puno. Desde muy tempranas horas de la mañana, varios pobladores se congregaron en la sede de la Municipalidad Provincial de El Collao donde participaron de los cortejos fúnebres.
Con el pasar de las horas, decenas de personas comenzaban a llegar a los exteriores de una entidad para poder dejar flores y elevar plegarias por el fallecimiento de estos militares. Luego, los cuerpos fueron paseados por el perímetro de la Plaza Mayor de Ilave en medio de los pedidos de justicia por parte de sus familiares.
Los féretros de estos miembros del Ejército fueron llevados hasta sus comunidades de origen donde sus deudos les darán una cristiana sepultura.