En Pisco, desde el muelle artesanal José Olaya, la pesca se encuentra operando con normalidad, sin embargo, por fiestas de fin de año es tradición que hasta el 31 zarpen las embarcaciones y no haya salida hasta el 4 de enero, pero no es por las restricciones el Gobierno.
Por otro lado, a este feriado programado se suma la veda del bonito y se está aprovechando esta paralización para realizar mantenimiento. También se informó que hay embarcaciones que han zarpado desde muy temprano y otros pescadores ya están listos para descargar sus productos.
Los pescadores informaron que el cierre de playas no ha afectado a San Andrés, indicaron que capitanía no ha dado ninguna indicación para la actividad pesquera, y que esta paralización es parte de la programación de cierre de año en Pisco. “La cadena productiva sigue, solo que por fiestas las embarcaciones no salen desde el 31 hasta el 4 de enero. El cierre de playas no altera la actividad pesquera, solo las playas”, indicó un pescador.