Los repartidores dejaron sus labores por unas horas para salir a protestar y exigir mejoras laborales. Más de 500 repartidores delivery acudieron hasta el circuito de playas y luego a los exteriores de las oficinas de Rappi en Surco para comunicarse con algún representante, sin embargo en el lugar nadie salió para atenderlos.
Ellos aseguran que se ven obligados a trabajar 14 horas al día sin ningún seguro de salud o de vida ante cualquier accidente. Asimismo, indican que los pagos por repartir son muy bajos y si reclaman, les bloquean el aplicativo por varias horas para que no puedan trabajar.
Ellos aseguran que incluso cuando el cliente les da propina, esta tiene que ser repartida con la empresa Rappi. Debido a los tantos abusos, que según los repartidores, la empresa realiza contra ellos, van a continuar saliendo a las calles para reclamar mejoras laborales.