A diario, los jóvenes del distrito de El Agustino deben esquivar restos de celulares robados, almohadas, colchones y hasta bolsas de basura para utilizar el skatepark ubicado en el malecón de La Amistad.
Esta obra fue presentada con bombos y platillos por el municipio en el 2016 pero a la fecha se ha convertido en la guarida preferida de los delincuentes.
Peter Henningsen, deportista profesional y pionero en deportes extremos que participó en el diseño de esta obra mira con indignación como este espacio de recreación ha sido abandonado por las autoridades pese a que asegura, demandó una inversión de más de 300 mil soles.
A este problema se suma la presencia de indigentes en las riberas del río Rímac. Esta realidad ha llevado a algunos deportistas calificados como Carlos Pérez, profesor de BMX, a tener que llevar sus propias escobas para poder hacer uso de las rampas.
Ante nuestra presencia personal de limpieza del municipio llegó hasta la zona, sin embargo, pese a que intentamos comunicarnos con las autoridades municipales no obtuvimos respuesta.