El día 12 de junio en la urbanización Entel, unos efectivos policiales sacaron a una mujer inconsciente y ensangrentada, envuelta entre mantas, de un hostal y la colocaron en una camilla, en la parte posterior de su patrulla policial. Hasta el momento se desconoce la identidad de la mujer ni qué fue lo que le pasó.
Los vecinos, alertados por esta situación, nuevamente salen en protesta a exigir que los hostales sean retirados de la urbanización Entel, pues pese a que la municipalidad ha clausurado varios de ellos, siguen funcionando en desacato a la ordenanza municipal e incentivando la prostitución y, al parecer, la trata de personas.
De acuerdo a los vecinos, la Policía y los fiscalizadores sí llegan para supervisar y patrullar la zona, pero los hostaleros continúan abriendo los locales, además, edificios de más cuatro pisos se construyen, pese a que la ordenanza municipal impide que se construyan más de estos inmuebles que terminan convirtiéndose en hostales.