Los vecinos de La Molina continúan con las denuncias por el basural que, desde hace años, se viene formando en el límite distrital entre este Pachacamac y Cieneguilla.
Ahí, la quema de basura como plásticos, llantas y demás desperdicios genera una densa humareda negra que causa daños en la salud, sobre todo enfermedades respiratorias, que ya sufren algunos de los pobladores.
Asimismo, indican que en la zona hay animales muertos, insectos y se desprende un fétido olor que tiene en alarma a todos los ciudadanos que viven en las inmediaciones y ya no toleran más la situación.
Es por esto que se han agrupado para exigir a las autoridades que tomen acciones concretas y reviertan la crítica situación que los envuelve.