Lo que parecía una relación amorosa salida de un cuento de hadas, en poco tiempo, se convirtió en una pesadilla. Nabila y Fuad se conocieron en el mes de mayo de 2017, se enamoraron y en pocos meses comenzaron a planear una vida juntos. Al cabo de pocos meses el hombre de 43 años cambio y comenzó a amenazarla y amedrentarla constantemente usando a su menor hijo para retenerla a su lado hasta que la golpeo brutalmente hasta provocarle la rotura de ocho costillas y demás lesiones.
Todo ocurrió en diciembre pasado, cuando fue llevaba a la clínica el médico que la recibió indicó que era necesario un internamiento pues el estado de salud de la modelo era sumamente delicado, las fracturas iban desde el segundo hasta el noveno arco costal y dos de las fracturas eran más complicadas porque se habían roto y los huesos se habían puesto uno sobre el otro.
Pero sin embargo, Nabila opto por retirarse hacia su casa, acompañada de su pareja identificado como Fuad Ali Darwish, quien la obligó a firmar el alta porque se negaba a pagar el porcentaje de la hospitalizan. La modelo confesó que calló en un principio por temor y por su pequeño hijo, pero a los pocos días, el malestar por tener las costillas rotas y demás lesiones, no podían ocultarse más y se descompenso
De regreso a la clínica, la modelo reveló que su pareja la continuó maltratándola, "Me hizo daño yo estaba con medicamentos muy fuertes, casi dormida (…) se aprovecho completamente de mi estado y abusaba de mi" narró la mujer y fue en esos momentos que Nabila comenzó a tomar valor y amargamente recordó otras agresiones de las que habría sido víctima durante la relación por lo que decidió terminar la relación definitivamente.
Pero la pesadilla no termino allí para esta joven modelo u madre de familia ya lamentablemente cuando acudió a la comisaria para presentar la denuncia del caso, la respuesta que por parte de las autoridades fue que ya habían pasado tres meses y no ellos no podían hacer nada.
Después de muchas dificultades, Nabila ha logrado colocar la denuncia y solicita la máxima pena para el que sería su agresor y pide garantías para su vida y la de su familia.