El ministro de Medio Ambiente de Brasil, Ricardo Salles, renunció tras el inicio de una investigación en su contra por tráfico ilegal de madera. "Presenté al señor presidente mi pedido de dimisión, que fue aceptado", sentenció el funcionario en una breve declaración a los periodistas, después de la cual no aceptó preguntas.
Salles formaba parte del “ala dura” del gobierno de Jair Bolsonaro, pero fue una de las figuras más criticadas por negar el problema de la deforestación en la Amazonía y defendió una política que daba prioridad a las actividades económicas en detrimento de la preservación de los bosques.
En abril del año pasado tuvo sus momentos más controversiales, ya que se le acusa de haber facilitado la exportación de madera ilegalmente talada a Estados Unidos y Europa, y en otra investigación es señalado por haber obstruido la mayor operación policial de incautación de madera ilegal. En 2020 la justicia ordenó su investigación por su gestión durante la crisis medioambiental que originó el mayor número de incendios en la Amazonía desde el 2010.