En Bolivia se vivió una dura jornada de manifestaciones, que no fueron detenidas ni por la llegada de la mayor competencia del mundo motor el Rally Dakar. El reclamo de los bolivianos y la Central Obrera de ese país contra el gobierno de Evo Morales, se debe a que exigen dejar sin vigor el nuevo Código Penal, pues lo acusan de criminalizar trabajos y el derecho a las protestas. Ante las protestas el gobierno boliviano ordenó a las fuerzas policiales resguardar las zonas principales por donde pasarían los vehículos de la competencia.
Pero mientras los manifestantes abarrotaban las calles, otro era el panorama en otra zona de La Paz donde incluso el mandatario presenció algunas condecoraciones a los competidores del rally.
En este evento donde se realizaron bailes típicos del país, Evo Morales, le restó importancia a las protestas y afirmó que los grupos que reclaman son pequeños y buscan crear convulsión en Bolivia.